Seguir adelante y no mirar atrás - mensajes del evangelio de la Palabra de Dios

Seguir adelante y no mirar atrás Sigue con los ojos fijos en el blanco Pasemos adelante y hacia arriba Sólo el Señor es Dios No volver al pasado Mirar al futuro Seguir adelante

20 Porque si después de haber escapado de las contaminaciones del mundo por el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo, se enredan de nuevo en ella y son vencidos, ellos se convirtieron en el último estado peor que el primero. 21 Pues mejor para ellos no haber conocido el camino de la justicia, que después de haberlo conocido, volverse atrás del santo mandamiento que ellos. 22 Así que vino a ellos lo que este proverbio dice verdad; Volver al perro a su vómito, y la puerca lavada a revolcarse de nuevo en el fango.

2 Pedro 2:20 al 22

Cuando todavía estaban perdidos y vagando por los caminos equivocados de la vida cometiendo toda clase de pecado y del mal, nuestro Dios y Padre, en su gran misericordia para con nosotros, tuvo compasión de nosotros y nos llevó a los brazos de nuestro amoroso y misericordioso, Libertador y Salvador, nuestro Señor Jesucristo. Muchos hermanos y hermanas, después de ser llevado a los brazos amorosos del Señor de la Gloria fueron liberados de las garras del mal y tuvo sus pecados, pecados y malas acciones completamente perdonado y olvidado. Además de ser limpia estos hijos e hijas de Dios ha cobrado nueva vida completamente restaurado.

En esos días de gran alegría y felicidad contagiosa muchos muy emocionado y no pudo ocultar la felicidad estaba muy extendida. Los recién convertidos estaban encantados no sólo con las maravillosas bendiciones, sino también con la sincera esperanza de que en adelante iba a vivir una vida mucho mejor en compañía de nuestro Señor Jesucristo.

Esta nueva vida sería una vida llena de milagros, bendiciones, paz, abundancia financiera, la salud, sin problemas, sin problemas y sin problemas. Se abrazaron con fe, confianza y perseverancia nuestro amado Señor Jesucristo, que resucitó gloriosamente por Dios el Padre, y con el miedo, la sinceridad de corazón y una gran fe, iluminado por el Espíritu Santo de Dios, tomado la sabia decisión de seguir el los pasos de nuestro Gran Maestro y Señor.

Con el tiempo se dieron cuenta de que la nueva vida fue una vida de dificultades, problemas, juicios, persecuciones y problemas que la vida no es bastante y no se que muchos se imaginan. Sin embargo, con el apoyo de Dios, el Señor Jesucristo y el Espíritu Santo de Dios, perseveraron en pie y orar y tener comunión diaria con la Palabra de Dios y siguió adelante con la dulzura, la humildad y la obediencia pasó haciendo el trabajo de Señor.

Sin embargo, algunos hermanos y hermanas, a causa de la falta de oración, el compañerismo y la vigilancia en cuanto a la relación con nuestro Señor Jesucristo y la Palabra de Dios en la fe y acabó desanimado, decepcionado y triste, una vez más se convirtió en presa fácil de los el enemigo de Dios.

Esto es algo que está muy triste, porque nosotros, que somos niños en la comprensión de las cosas sagradas sentimos en nuestro corazón que los que lo hacen están obligados a un camino de gran dolor y destrucción, para volver a la antigua usanza y el olvido relegando el camino verdadero y viviente que el Señor Jesucristo ha abierto, con gran sacrificio, que utilizan para su propia vida divina.

Que viene de esta manera que se espera del futuro? Lo que nuestro Dios puede hacer por esa persona? Ahora! Todos creemos y por la fe, tenemos el conocimiento y la garantía de que nuestro Dios ha venido aquí en persona entre nosotros para redimirnos y nos libre de las garras del mal.

Qué esperar cuando Dios es rechazado y olvidado? ¿Quién y qué de nuevo puede liberar al hombre oa la mujer que decide entregar una vez más la práctica de la rebelión, la rebelión y el pecado? ¿Quién? Si Dios es el Señor?

Es por eso que tenemos que participar más en la lectura de la Palabra de Dios, la oración y la comunión con nuestros hermanos para que podamos estar bajo la protección y la sabiduría de la Santa Trinidad.

Amen y Gracias a Dios.